A partir de ahí, Nike empieza a trabajar y se realizan varias reuniones en las que por parte del club está el presidente, el director General y el máximo representante de BLM (Barça Licensing & Merchandising), la sociedad del club que comercializa de forma masiva sus productos. El club traslada a Nike un serie de ideas conmemorativas para que los diseñadores de la multinacional empiecen a trabajar.