Este sería un año sin títulos para River aunque en términos económicos fue positivo ya que se produjeron las transferencias de Pablo Aimar al Valencia y de Javier Saviola al Barcelona en sumas millonarias para la época. Alfredo Davicce declaró que Ramón Díaz era la mejor opción para suceder a Gallego y finalmente -tras presiones de la comisión directiva y el pedido popular de los hinchas- a mediados de 2001 se produce el regreso del histórico entrenador.