Si la combinación de ballena y rayas torcidas generaba de todo menos pasión en lo estético, camiseta de italia en lo económico fue un pelotazo. Whalefin, una empresa de la compañía Amber Group con sede en Hong Kong, que opera en el sector Fintech con bitcoins, tokens, criptomonedas y con dinero normal, se convertía en patrocinador principal del club y metía la ballena de su logo en la mareante camiseta del Atleti. El Athletic, club de referencia en España y en el mundo, con una historia ejemplar de más de cien años, fue el centro de las críticas en la temporada 2003/04, cuando el pintor Darío Urzay diseñó una prenda bautizada popularmente como la camiseta del ketchup.